Para lo adictos al queso, una croqueta que no puede faltar. Untuosa y cremosa, con un toque ahumado que le aporta un carácter muy especial. Freír el producto desde congelado. Sumergir en aceite bien caliente (175?180 °C) hasta obtener un color dorado y una textura crujiente. (6 Bolsas con 20u aproximadamente)
138
450g
10x11
175-180