El fermento gallego le proporciona al pan un conjunto de aromas, matices y sabores que lo convierten en una pieza única. Nuestro Bollo Cantábrico incorpora este ingrediente de las tahonas de Galicia, por eso presenta una magnífica miga de húmedo alveolo, tonalidad cremosa y suave textura. Su corteza, fina pero crujiente, combina los tonos dorados de la cocción con el blanco níveo del enharinado, mientras que en boca resulta tierno y meloso, con el tenue gusto del aceite de oliva que incorpora su receta.
45
145g
4x8
30-40
190-210
5-8'
230mm