Un crujiente pan japonés envuelve este tierno langostino que té sorprenderá en boca. Freír el producto desde congelado. Sumergir en aceite bien caliente (175-180 °C) hasta obtener un color dorado y una textura crujiente.
Conservar a -18ºC. Una vez descongelado, no volver a congelar. Freír e l producto desde congelado. Sumergir en aceite bien caliente (175-180º C) hasta obtener un color dorado y una textura crujiente.